Fuera de las casillas

La música no conoce de fronteras. El amor, la pasión por la música, tampoco. Desde ese lugar preciso, Pilar Mercado rompe con sus propias estructuras y con los encasillamientos externos para ir detrás de ese sueño al que se abraza entre acordes. Dueña de una voz prodigiosa y envolvente, la joven cantante riojana traza su derrotero artístico desde Córdoba, pero sin dejar de lado sus raíces más profundas, a las que vuelve para refundarse.

Pilar Mercado abre una puerta tras otra. Desde La Rioja hacia Córdoba y desde Córdoba hacia el ilimitado universo que ofrecen las redes sociales, quiebra las barreras de los establecido y se desafía a abrirse paso en el intrincado mundo de la música, donde lo más complejo es lograr dar a luz una identidad propia a la que serle fiel, más allá de todo mandato externo. Lleva la música como bandera y un puñado de muy buenas convicciones que le fueron dadas a lo largo del camino que implica descubrirse, asumirse y valorarse. Y es que un día decidió que iba a ser ella misma, lo más espontánea posible.
Es, desde entonces, que suelta al aire sonrisas como canciones y canciones como alas de mariposa con las que se aleja de los encasillamientos. “No me cierro a nada” afirma, y así lo deja traslucir al aceptar -vía redes, como una manera de estrechar lazos- el convite de 1591 Cultura + Espectáculos.
¿CUÁNDO SURGIÓ TU VOCACIÓN POR EL CANTO? ¿DESDE QUÉ MOMENTO TE SENTISTE IDENTIFICADA CON ESA FACETA ARTÍSTICA? ¿HAY OTRAS VOCACIONES RELACIONADAS CON EL ARTE QUE HAYAS DESARROLLADO O QUE TE GUSTARÍA DESARROLLAR EN UN FUTURO?
No sabría decirte exactamente cuándo. Creo que desde que nací viene conmigo. Hay muchos videos de pequeña cantando en el baño o en la pieza. Son muy graciosos. A los 4 años empecé a bailar folklore en la academia de mi tía, Nélida Rearte (“Mis Montañas”) y lo hice durante seis años. En un momento me cansé porque me había agarrado una cierta negación por esa música, entonces empecé danzas clásicas en Cite Arte y descubrí una de mis pasiones más grandes. Hasta el día de hoy sigo tomando clases. Pero no me imagino dedicándome a eso profesionalmente, es sólo un hobbie que disfruto mucho. Durante toda mi adolescencia tomé clases de hip hop, salsa, street dance, dance hall. Bailar es uno de mis cables a tierra y disfruto muchísimo hacerlo, nunca lo dejaría. Volviendo al canto, siempre cantaba en mi casa. Me pasaba tardes enteras sacando canciones que me gustaban. Pero era súper vergonzosa. Mi madre me hacía cantar al frente de la gente; al principio entraba en pánico pero de a poco le fui perdiendo el miedo y empecé a cantar en reuniones familiares, o con amigos, luego en actos de la escuela, etc. A los 16 años me tomé un descanso de la danza clásica y empecé comedia musical en Fosse. Me sirvió muchísimo hacer teatro porque perdí el poco miedito que me quedaba y empecé a disfrutar de lo que hacía. Finalmente, a los 17 comencé clases de piano y ensamble con Ana Robles y me di cuenta que eso era lo que yo quería: cantar y tener una banda.
¿SI TUVIERAS QUE CONTAR SOBRE TUS RAÍCES VINCULADAS A LA MÚSICA, DE QUIÉN DEBERÍAS HABLAR EN TU ENTORNO FAMILIAR? ¿A QUIÉN HARÍAS REFERENCIA FUERA DE TU ENTORNO FAMILIAR?
¡Mis padres! Ambos estudiaron música y cantan hermoso. Cuando era chica se turnaban para enseñarme. Y de hecho para entrar a La Colmena ellos fueron los que me prepararon para rendir. No puedo dejar de nombrar a mi querido Tata, el “cordero Mercado”. Me pasaba horas escuchándolo tocar el piano y me hacía cantar Alfonsina y el mar, acompañada por él, claro. Fuera de mi entorno familiar nombraría a Hulda Estrabou, Camilo Matta y Viviana Bognar (aunque los adoro como si fuesen de mi familia). Siempre los admiré muchísimo y tuve la suerte de compartir muchos momentos con ellos. Hulda es una de las mejores amigas de mi mamá y una vez ella le pidió que me acompañara para cantar en Espacio 73. Yo estaba muerta de nervios porque era una gran presión que ¡Hulda Estrabou toque conmigo! Pero confió siempre en mí y me hizo sentir súper cómoda. Desde ahí no me separé más de ella, siempre que podemos organizamos algo juntas y espero poder compartir mucha más música. Camilo y Vivi son grandes amigos de mis padres y yo amaba ir a las juntadas en su casa. Desde pequeña disfrutaba de escucharlos cantar o hablar de música. Son unos genios y me inspiraron a querer vivir de esto.
¿CÓMO FUE TU RECORRIDO ACADÉMICO EN LA RIOJA? ¿POR QUÉ INSTITUCIONES EDUCATIVAS PASASTE?
Fui al jardín Rosario Vera Peñaloza desde los 2 años; si, repetí la sala de 3 porque no sabían qué hacer conmigo, era inquieta y hablaba hasta por los codos, entonces me mandaron antes. A la primaria la cursé en la escuela Manuel Belgrano y la secundaria en el I.S.A.E.
¿EN QUÉ MOMENTO SENTISTE QUE TU FUTURO PODÍA ESTAR FUERA DE LA PROVINCIA? ¿POR QUÉ DECIDISTE RADICARTE EN CÓRDOBA?
Cuando estaba terminando la escuela elegí hacer escribanía. Por más que disfrutaba mucho la música tenía el prejuicio de que “no se puede vivir de eso”. Comencé a hacer el cursillo y me fue excelente, pero me di cuenta que yo no podía dedicarme a hacer un trabajo de escritorio toda mi vida y que quería ser artista. Entonces empecé a averiguar las opciones que había en La Rioja, ninguna me gustaba. No soy muy amante de la música clásica como para dedicarme a ella. Irme a Buenos Aires me parecía un salto muy grande, pero tenía varios amigos que se venían a Córdoba, entonces averigüé las opciones y La Colmena tenía lo que yo buscaba.
¿CÓMO FUE VIVIR ESE DESARRAIGO? ¿LO SENTISTE PARTICULARMENTE O LO VIVISTE CON TOTAL NATURALIDAD?
¡Fue horrible! Soy muy familiera, necesito demasiado a mis afectos y me sentía muy sola acá. Me costaba hacer amigos al principio, tenía miedo de andar tarde por la calle entonces me quedaba en el departamento todo el día. Los domingos me agarraban depresiones tremendas porque extrañaba el asado, charlar con mis primos, abrazar a mi hermanito y jugar con él. Muchas veces sentí ganas de dejar todo y volverme, pero en el fondo sabía que allá no iba a encontrar lo que quería. Cada vez que iba a clases me sentía tan feliz que me decía ‘tengo que ser fuerte y bancarla’, y acá estoy. Fue una experiencia que me marcó, pero agradezco porque aprendí muchas cosas.
¿HAY ALGO QUE EXTRAÑES ESPECIALMENTE DE LA RIOJA? ¿ALGO POR LO QUE NECESITES VOLVER EXCEPTUANDO, EN ESTE PUNTO, A LA FAMILIA?
La verdad que me adapte muchísimo a Córdoba y la amo. Hoy la siento mi hogar. Pero hay días que extraño la tranquilidad de allá. Tal vez porque la vida que llevaba cuando vivía ahí era muy distinta a la que tengo hoy. Extraño sus paisajes. Pero lo que más extraño es mi familia. No sólo a cada una de las personas que la conforman sino también los momentos que se comparten. Las juntadas a tomar el té o comer algo por ejemplo.
¿CUÁL Y CÓMO SE FUE DANDO TU EXPERIENCIA EN CÓRDOBA? ¿EN QUÉ ASPECTOS SENTÍS QUE LOGRASTE UN CRECIMIENTO EN LO PERSONAL Y EN LO ARTÍSTICO?
El primer año que viví acá fue de total crecimiento personal. Tuve que aprender a relacionarme mejor con la gente para sentirme más cómoda en los lugares a donde iba. Aprender a mantener el departamento en condiciones, las cuentas al día. Cosas que son simples pero que nunca había hecho y me volvían loca. El crecimiento artístico vino de la mano. Porque me di cuenta que si yo no hacía las cosas, nadie las iba a hacer por mí. Trabajé muchísimo el amor propio y la confianza en que lo que hago es genuino y por ende no es malo, lo que no quiere decir que le vaya a gustar a todo el mundo.
¿CUÁL ES TU BÚSQUEDA MUSICAL? ¿A TRAVÉS DE QUÉ ESTILOS TE GUSTA INDAGAR? ¿QUÉ PUERTAS PUDISTE IR ABRIENDO DESDE TUS GUSTOS PARTICULARES? ¿A QUÉ ESTÁS ABIERTA Y A QUÉ NO DENTRO DEL ESPECTRO DEL CANTO Y LA COMPOSICIÓN?
No me gusta encasillarme en ningún género específico. Creo que de todos se puede aprender herramientas nuevas para crear mi propia identidad. Pero los estilos que más me gustan son el soul, R&B, algo de jazz y folklore. No me cierro a nada. Creo que todo puede ser productivo y que por algo se dan las oportunidades también. Pero siendo sincera, no me imagino cantando cumbia o cuarteto, ni creo que alguien me llame para hacerlo.
¿CUÁNTO HAY DE LA RIOJA, O CUÁNTO IDENTIFICÁS DE LA RIOJA EN TUS GUSTOS O BÚSQUEDAS MUSICALES?
Todo. Siento que mis fraseos tienen muchísimo que ver con nuestro folklore. Muchas de mis composiciones, que son canciones, tienen un tinte folklórico. Ritmos ternarios jugando con polirritmia. Si bien tuve una época de adolescente rebelde en la que ‘odiaba’ mis raíces y soñaba con ser como Beyoncé, hoy estoy orgullosa de ser de La Rioja. Amo nuestra música y la defiendo a muerte. Creo que eso se deja ver en todo lo que hago.
¿CÓMO AVIZORÁS EL CAMINO A RECORRER? CUÁLES SON TUS OBJETIVOS EN LO INMEDIATO Y CUÁLES TUS OBJETIVOS A FUTURO?
Ojalá supiera cuál es el camino. Pero sé que mi objetivo es vivir de cantar mi música. Sueño con poder armar grandes shows con bailarines y big bands tocando mis canciones. En lo inmediato estoy produciendo mis canciones con un tremendo equipo (Santiago Baravalle, Nicolás Travaini y Damián Barrera). En julio grabamos las primeras cuatro canciones y si todo va bien, en agosto o septiembre saldrá mi primer single con mucha producción y mucho amor.

MÁS ALLÁ DE TODO LÍMITE
Las redes sociales invitan a adentrarse en un universo tan amplio como desconocido, tan múltiple como diverso. Pero también, y fundamentalmente, constituyen una herramienta inmejorable para llevar el arte más allá de todo posible límite. Como mujer atenta al tiempo que le toca vivir, Pilar no duda de las ventajas que, bien empleado, proporciona el mundo virtual a su quehacer diario, aunque tampoco pierde de vista que la música es lo que sigue importando por sobre todas las cosas, y que muchas veces es puesta en un segundo plano. La música y el mensaje, con el que también se compromete, muy atenta a las circunstancias que la rodean y que, de alguna manera, también la definen.
Duda de la existencia de una liberación total, pero desde su mundo musical confía en que esa búsqueda constante permite encontrar nuevos horizontes y aprender de las experiencias. Y algo fudamental: ya no calla todo lo que tiene para decir.
¿QUÉ VISIÓN TENÉS EN RELACIÓN A LA INDUSTRIA MUSICAL EN LA ACTUALIDAD Y FRENTE A LOS NUEVOS DESAFÍOS QUE PLANTEA EL DESARROLLO CONSTANTE DE LAS TECNOLOGÍAS Y LOS MECANISMOS DE DIFUSIÓN?
No te voy a negar que me molesta bastante. Siento que hoy la música pasó a último plano. Es mucho más importante el video o la foto que la música en sí. Pero tampoco me niego y trato de sacar provecho de eso.
¿CÓMO ES TU RELACIÓN CON LAS REDES SOCIALES? SENTÍS QUE PUEDEN POTENCIAR TU LABOR MUSICAL? ¿DESDE QUÉ LUGAR?
Me llevo bien con las redes sociales, creo que son un medio de comunicación que usado correctamente puede traer sus frutos. La que más uso es Instagram. Al ser una red social tan masiva, me permite contactarme con gente de muchos lugares distintos y darme a conocer como artista. Pero para lograrlo hay que trabajar mucho en eso y asumo que a veces me vuelvo loca, porque no estudié marketing digital y por lo tanto hay muchas cosas que voy aprendiendo por prueba y error.
¿CUANDO REALIZÁS UN POSTEO EN INSTAGRAM, POR EJEMPLO, SENTÍS QUE YA NO HAY FRONTERAS PARA LA MÚSICA; QUE DA IGUAL QUE ESTÉS EN LA RIOJA, EN CÓRDOBA O EN CUALQUIER OTRA PARTE PORQUE AL MISMO TIEMPO PODÉS ESTAR EN TODO EL MUNDO?
Como te decía anteriormente, es grandioso poder compartir lo que hago con gente de muchos lugares distintos y romper esa barrera de la distancia. Sin embargo para mí nada es igual a la música en vivo, aunque haya quedado en segundo plano para muchos.
¿PENSÁS QUE EN LAS REDES SOCIALES SE VE LO QUE SE MUESTRA O QUE EN LO QUE SE MUESTRA PUEDE HABER SENTIMIENTOS O SENSACIONES OCULTAS O QUE, INCLUSO, DE MANERA CONSCIENTE O INCONSCIENTE NO SE QUIEREN MOSTRAR?
Bueno, hace un tiempo que estoy contactada con un equipo de trabajo que me ayuda a manejar mis redes sociales. Entendemos que es una buena forma de llegar al público que queremos y en un futuro lograr que esas personas consuman nuestro trabajo. Para ello tuve que repensarme como artista y elegir el perfil que quería mostrar. Entonces decidí que iba a ser yo misma, lo más espontánea posible. Si hay algo que detesto de las redes es la cantidad de información que recibimos respecto de cómo tenemos que vernos, cómo tiene que ser nuestra familia o entorno, qué cosas podemos o no hacer, etc. Y todos, inconscientemente seguimos ese patrón y mostramos nuestra ‘mejor versión’, como si existiera una. Si yo pretendo que me siga mucha gente, no puedo ser irresponsable y enviar ese mensaje tan erróneo. No soy perfecta -nadie lo es- y muchas veces sufro por amores, reniego de mi cuerpo o no estoy conforme con mi música. Entonces me sale mostrarme en todos mis estados, pero siempre tratando de trabajar la aceptación y el amor propio, que me permiten superar esos malos pensamientos. De todas maneras, cuando empecé a hacer publicaciones más jugadas usando mi cuerpo, fue difícil. Aunque yo tengo claro que mi objetivo es mostrarme natural y transmitir ese amor propio que alimento cada día, siempre va a estar la gente que cree que ‘estás mostrando el culo porque es lo que vende’ o ‘subís esas fotos porque querés llamar la atención’. Cuando te exponés desde un lugar más íntimo tenés que estar fuerte y entender que no todos piensan igual que vos y que los comentarios con maldad no tienen que afectarte.
¿CUÁL ES, SEGÚN CONSIDERÁS Y DESDE TU ESPACIO PARTICULAR, TU MENSAJE PARA DAR COMO CANTANTE Y COMPOSITORA Y, MÁS AÚN, COMO MUJER?
Como cantante y compositora me encantaría poder transmitir un mensaje de amor hacia uno mismo. Que confiemos en que todo lo que nos proponemos se puede lograr con esfuerzo y dedicación y que no tenemos que permitir que nadie nos frustre los sueños. Como mujer no hay que tener miedo. Somos fuertes y valemos mucho. Somos hermosas en todas nuestras formas y nadie puede decirnos lo contrario. Tenemos muchas compañeras a nuestro alrededor que nos acompañan y están en la misma. No estamos solas, y eso es muy conmovedor.
¿CÓMO VIVÍS, PRECISAMENTE DESDE TU ESENCIA DE MUJER Y TENIENDO EN CUENTA LA MANERA EN QUE LAS MUJERES SE VIENEN EXPRESANDO, LOS TIEMPOS QUE CORREN Y QUE VAN PLANTEANDO LA NECESIDAD DE TRANSFORMACIONES PROFUNDAS EN LA SOCIEDAD?
Son tiempos de mucha sensibilidad. Muchos sentimientos a flor de piel. Estoy deconstruyéndome de a poco. Si quiero que haya una transformación en el otro, primero tengo que cambiar yo. Todos hemos sido criados en esta sociedad patriarcal y, al menos en mi caso, a pesar de haber cambiado muchos pensamientos, hay cuestiones que siguen pisando fuerte y que trato todos los días de ir mejorando. Por momentos me siento dolida, decepcionada, y pienso que nada va a cambiar. Pero por suerte cada vez me encuentro con más personas que están en el mismo proceso que yo y que me alientan a seguir y tener fe de transformación.
¿TE INVOLUCRÁS O TE SENTÍS IDENTIFICADA CON ALGUNA DE LAS DIFERENTES MANIFESTACIONES QUE SE VIENE DANDO, COMO LOS COLECTIVOS FEMINISTAS, POR EJEMPLO, O PREFERÍS EXPRESARTE DESDE LA MÚSICA, TAMBIÉN COMO UNA FORMA DE MILITAR POR LOS DERECHOS DE LAS MUJERES?
Apoyo a todas las pibas que se ponen el pañuelo verde y salen a la calle a luchar por nuestros derechos. Trato de ir a las marchas y sumar mi apoyo a esa digna manifestación. No pertenezco a ningún colectivo en especial -me refiero a organizaciones-, pero sí trato de sumar desde mi lugar. Uso mucho las redes para eso. También andan dando vuelta algunas canciones, pero que aún no salieron a la luz. Ojalá sea pronto.
“Y ES QUE NUNCA CALLA, SOLO SE DESPRENDE Y ES IGUAL A LAS GUIRNALDAS” REZA EL TATUAJE EN TU ANTEBRAZO, ¿ALGUNA VEZ CALLASTE ALGO QUE SENTISTE QUE DEBÍAS DECIR PARA YA NO VOLVER A CALLAR? ¿SENTÍS QUE ALCANZASTE ALGÚN PUNTO DE LIBERACIÓN, O QUE LOGRAR ESE PUNTO DE LIBERACIÓN SE TRATA DE UNA BÚSQUEDA CONSTANTE?
Sí, he callado muchas cosas. Y casualmente a ese tatuaje me lo hice en una de las épocas de mi vida en que más callé. Estaba en una relación que me destrozó en muchos aspectos. No me gustaba mi cuerpo, no me gustaba cómo cantaba, me sentía inútil y no sabía pedir ayuda porque estaba totalmente sometida. Fue duro, pero hablarlo me liberó. De todas maneras, creo que no existe la liberación total. Los humanos somos especialistas en complicar todo. Pero justamente esa búsqueda constante nos hace encontrar nuevos horizontes y aprender de las experiencias.
¿CÓMO TE GUSTARÍA VERTE, DIGAMOS…DE AQUÍ A 10 AÑOS?
Uf, qué difícil. Un par de años atrás me imaginaba a mis 34 con una familia, hijos, casa, perro y viviendo de la música, pero hoy no sé qué decir. Estoy muy enfocada en mi carrera profesional. Me encantaría estar cantando mi música con los músicos que quiero, en los lugares que me gustan y sobre todo, vivir solamente de eso. Además de que sería muy feliz si mi música le hace bien a la gente que me escucha. Ese es mi objetivo y voy a poner toda mi energía para que así sea.

Facebook
Twitter
LinkedIn
WhatsApp