Delicada construcción de la identidad

El Mercado Artesanal de La Rioja transita el año de su 50 aniversario. Una historia ligada al fortalecimiento de los oficios artesanales, pero también a la amplificación del registro de los hacedores, con una mirada territorial amplia y el compromiso irrestricto de quienes llevan adelante la gestión.

“Amplificamos, trabajamos con toda la provincia. Nos movemos en todos los territorios y no solamente en las cabeceras, sino que avanzamos los territorios rurales, los parajes, los lugares con difícil accesibilidad”, afirma a 1591 Cultura+Espectáculos María Maza, a cargo de la dirección del Mercado Artesanal. Esta primera definición abre las puertas a un mundo en el que la pasión por lo que se hace, y la entrega con que se lo hace, da cuenta de una manera de concebir la delicada construcción de una identidad riojana vinculada a la producción artesanal. Pero no sólo a eso.

El Mercado Artesanal de La Rioja transita el año de su 50 aniversario. Desde su creación por Ley Provincial N° 3.256 promulgada en 1973, el organismo estatal que actualmente está bajo la órbita de la Secretaria de Culturas de La Rioja, perteneciente al Ministerio de Turismo y Culturas tiene la misión fundamental de preservar, proteger, difundir y fortalecer los oficios artesanales de la provincia, mediante acciones tendientes a la promoción, comercialización, producción y capacitación aplicados al sector artesanal en todas sus especialidades, como así también preservar y rescatar las artesanías tradicionales y el arte popular, mediante el estudio e investigación, coordinación y ejecución de proyectos, relevamiento censal, revitalización de técnicas y diseños, estudio de mercados, eventos feriales, etc.

Asimismo, se hizo entrega también de los Premiso RUNA, que se implementa con el objetivo de apostar al reconocimiento de los artesanos de La Rioja, fortaleciencia y jerarquizando nuestros oficios artesanales. En esencia, la distinción tiene como objetivo reconocer a los hacedoresculturales, quienes entregan sus expresiones a través de riquísimas facetas hábilmente demostradas, siendo dieciocho las designaciones que representan a cada departamento de nuestra provincia en distintas modalidades, las cuales fueron acordadas conjuntamente con las áreas municipales departamentales que conforman el Consejo Provincial de Culturas.

¿Pero cómo se coordina todo este trabajo que se realiza desde el Mercado Artesanal?

María Maza es quien lo explica con detalle, exponiendo además en cada una de sus palabras la pasión y el amor por una tarea que es absolutamente minuciosa y que requiere de un compromiso y de una entrega que pone en evidencia el rol del Estado a la hora de brindar los respaldos que van más allá de una simple asistencia financiera y que, en esencia, tiene que ver con la humanización de quienes están desarrollando sus labores artesanales en los espacios más recónditos de nuestra provincia, donde llegar es prácticamente una proesa que, luego, se convierte en la construcción de una idea de lo colectivo, en la representación de un todo.

“Hay mucho viaje de trabajo de campo, campañas, viajes de registro, de trabajo en territorio que es no quedarse sólo con la mirada del gobierno municipal. En muchos lugares el concepto de la artesanía es otro. Hay que poder establecer dialogos y entender que este es un espacio que fortalece, que divulga, que promociona, que estimula. Está bueno tener esos diálogos, tener esos espacios. Por la legislación que tenemos estamos abocados el concepto de artesanía y hay que tener esa visión, aunque amplificada, pero entender eso, hacia dónde apuntamos”, señala con amplio conocimiento Maza, a cargo de un organismo que trabaja día tras día con el objetivo de conservar la riojanidad artesanal en sus diferentes expresiones y dando a conocer a nuestros hacedores culturales, artesanas y artesanos que reflejan en cada obra su vida, el sentir estético, su hábitat, e idiosincrasia con destreza y dominio técnico, objetos con predominio de trabajo manual, alto valor artístico, identidad cultural y destino socioeconómico.

“El Mercado Artesanal está abocado y relacionado a la misión de abarcar a un sector, que ya la palabra sector se ha ido desdibujando y me suena un poco más orientado a la persona, cuando en realidad hablamos de la comunidad artesanal y no tanto del sector, lo que está más vinculado al material”, destaca la directora del Mercado Artesanal, quien además repasa: “Tenemos tres legislaciones: la de creación específicamente del Mercado Artesanal, la Ley de Artesanías y la Ley de Fomento. Las tres leyes están vinculadas a los oficios desde los saberes y desde el patrimonio tanto material como inmaterial, es decir que está muy relacionado con el ámbito de la cultura. El concepto de artesanías se sigue discutiendo hasta el día de hoy, es una eterna discusión, entonces hay una toma de decisiones hacia dónde uno quiere orientarlo, pero con un conocimiento de la realidad. Si no conocemos la realidad, si no sabemos lo que hay en la Provincia, qué tenemos, qué teníamos, qué pasó con lo que teníamos y no está, dónde está, existe, no existe, por qué vivió, por qué no vivió, la transformación del mundo, las nuevas tecnologías, lo que pasa en el mundo en general, no podemos desarrollar políticas activas. Todo eso nos permite proyectarnos, pero tenemos que saber también qué está pasando en el mundo. En esos paralelismos de lo que existe en las artesanías se instauran un montón de miradas: lo comercial, lo innovador, lo purista. Tiene que ver con la mirada de cada uno, pero todo eso hay que bajarlo acá, a lo que tenemos. Eso es muy significativo y el trabajo en territorio nos permite vivirlo”.

En este punto, es importante señalar que el Mercado Artesanal cuenta con un fondo financiero que permite la compra de artesanías tradicionales riojanas de toda la provincia, y en la modalidad de consignación se admiten los productos de arte popular y otras especialidades. A su vez, el Mercado se encarga de promover acciones de comercialización y promoción consolidando el consumo y difusión de los productos artesanales ya sean de carácter utilitario, decorativo o simbólico a nivel regional, provincial, nacional e internacional, y la articulación entre distintos eslabones del proceso para favorecer una evolución comercial sostenida.

La de la comercialización de los productos artesanales es, quizá, una de las visiones que más cuesta alinear con quienes producen, precisamente, y es uno de los ejes fundamentales sobre los que se trabaja, atendiendo las realidades y necesidades particulares de cada artesano.

“Muchos artesanos no lo ven; no ven el futuro que tendrían con la venta de sus producciones, pero no lo ven porque hay muchas cosas que están vinculadas con su crianza, con su modo de vida. Nosotros nos vinculamos desde lo humano, que es algo muy importante, porque no se trata solamente de la cuestión de lo productivo, o lo vinculado con el turismo. Los espacios se conforman y la comercialización se acrecentó muchísimo, sobre todo luego de la pandemia”, destaca Maza que, además, no duda en afirmar: “Nuestra artesanía esta muy bien posicionada a nivel nacional”.

En este punto, quien está al frente de la gestión del Mercado Artesanal hace referencia a “lo tradicional”. Y en este marco, sostiene que “hay muchas cuestiones que nosotros divulgamos de lo que tiene que ver con la técnica, con el proceso productivo en sí, y hay otras cuestiones que las vinculamos a lo innovador, porque la cultura es dinámica. No obstante, lo que entra en juego es el decir que no se trata de productos industrializados. Eso habla también de lo exclusivo, está relacionado con eso y con el aprovisionamiento de la materia prima. Cada departamento tiene su identidad, cada artesano tiene su territorio, convive con el clima, con un espacio comunitario; hay lugares que son más fríos y eso afecta a su productividad. El entorno forma parte vivencial del ser humano y eso no es menor. Ahí van todas las decisiones que se pueden tomar y el conocimiento de todo eso es riquísimo, es hermoso. Desde un principio, desde el nacimiento de la institución, hemos estado signados en eso, en que tenía que ser ese tipo de espacio, llegar a esos lugares es sumamente importante, es un diálogo constante. Hoy la tecnología nos ayuda un montón, pero hay muchos lugares en los que no hay conectividad. Tenemos que ser ese nexo, esa interrelación, eso que yo llamo un patio abierto donde confluyen todas estas latitudes que conforman este espacio. El Mercado no somos nosotros sentados en este escritorio; están los diálogos, los lenguajes, los símbolos, las historias, los paisajes a nivel objetos y a nivel persona. Queremos tener más locales, más lugares, más bocas de expendio, proyectarnos, pero también resguardar la certificación del producto, la identidad del autor, que es súper importante. Esa identificación es muy valorada por la gente que viene, por las escuelas que hacen visitas guiadas. Hace tiempo llevamos esa misma línea de trabajo y todos han respetado eso, por eso el Mercado sigue siendo lo que es”.

Respecto de las líneas de financiamiento que maneja el Mercado Artesanal, María Maza remarcó que “la que está en vigencia ahora es el Programa de fomento para adquisición, compra de materia prima, insumos, herramientas, a la que además nosotros, con una decisión de gestión, le agregamos las participaciones en ferias, stands y formación”. En este marco, explicó además que estos beneficios ya se entregaron en once departamentos de la Provincua y en Capital y que la misma “está activa para los artesanos en producción. Hay requerimientos especiales para que puedan registrarse. Tienen que estar produciendo y comercializando, en cualquiera de las modalidades de comercialización”.

“Estamos planteando algunos programas; buscamos poder fortalecer otros espacios de boca de expendio del Mercado Artesanal y a la vez crear espacios nuevos, pero para ello hay que estar en contexto con las realidades de los pueblos”, destacó Maza al preguntársele por los objetivos que se trazan para la gestión. “Tiene que ser algo sostenido en el tiempo. Estamos en proceso de ver el cómo, dónde se puede comercializar cada cosa. Hay que tener en cuenta los conceptos respecto de lo que son los productos culturales. Con Turismo también venimos trabajando en eso y es una cuestión a fortalecer. Trabajar espacios que sean lugares en que los artesanos puedan desarrollar su tarea, que la persona pueda visitarlo, conocer y que exista también ese espacio para la venta, pero es algo que debe sostenerse. Esos espacios, esas rutas estratégicas, deben poner en valor a muchos lugares. Hay que elaborar programas, itinierarios. Es una tarea que requiere de un trabajo articulado entre todas las áreas”.

LA HISTORIA

EL MERCADO ARTESANAL SE CREA POR LEY PROVINCIAL N°3256, EN EL AÑO 1973, Y SU MISIÓN ES PRESERVAR, PROTEGER, DIFUNDIR Y FORTALECER LOS OFICIOS ARTESANALES DE NUESTRA PROVINCIA. LO HACE MEDIANTE ACCIONES COMO LA PROMOCIÓN, COMERCIALIZACIÓN, PRODUCCIÓN Y CAPACITACION.

EL MERCADO ARTESANAL NO SÓLO ATESORA ARTESANÍAS, SINO QUE SIGNIFICA UN ESPACIO SIGNADO POR NUESTRA HISTORIA E IDENTIDAD.

ADEMÁS VISIBILIZA LA IMPORTANCIA DE LOS PROCESOS DE MANUFACTURA, CONOCIMIENTO INMATERIAL, TRANSMISIÓN DE SABERES Y APROVECHAMIENTO DE MATERIAS PRIMAS.

PODÉS VISITARLO EN PELAGIO B. LUNA 790, DE LUNES A SÁBADO DE 9 A 13 HORAS Y 17 A 21 HORAS.

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