El futuro llegó

Martín Lazo es una de las voces jóvenes que viene a renovar el amplio espectro musical con que cuenta La Rioja. Con tan sólo 22 años ya grabó su primer trabajo discográfico, Para siempre, que en contexto de pandemia y aislamiento, ya se puede escuchar en plataformas digitales.

Martín Lazo es una de las voces jóvenes que viene a renovar el amplio espectro musical con que cuenta La Rioja. Con tan sólo 22 años ya grabó su primer trabajo discográfico, Para siempre, que en contexto de pandemia y aislamiento, ya se puede escuchar en plataformas digitales, mientras aguarda por su presentación en público. Del folklore hacia el tango y desde el tango hacia lo melódico, en una exploración constante y que hace pie en sueños que ya comenzaron a derrumbar las fronteras. 

La voz melodiosa de Martín Lazo dibuja paisajes en el aire que perdurarán «Por siempre», tal y como bautizó a su primer trabajo discográfico que ya suena en más de 90 plataformas, haciendo frente a la pandemia y al distanciamiento que, si bien le impidió poder presentarlo en público, ya lo llevó a recorrer miles y miles de kilómetros, llegando hasta destinos que, de otra manera, hubieran sido impensados.

Es así como el joven cantante riojano comienza a trazar el recorrido para un camino en el que la música es el fundamento que lo acompaña desde pequeño, cuando en su habitación y frente al televisor, sintió ese llamado especial que, de inmediato, transmitió a su madre. Tenía por aquel entonces 9 años y un cantante español de renombre, David Bisbal, se convertiría en inspiración para que Martín iniciara un recorrido que hoy lo lleva a ser una de las voces riojanas con mayor proyección, teniendo en cuenta sus apenas 22 años y un ímpetu que no se detiene en su afán de proyectarse hacia nuevos horizontes.

Del folklore hacia el tango y desde el tango hacia lo melódico, Martín no deja de explorar, ni se cierra a ninguna posibilidad, desde una genuina inquietud por el aprendizaje y el crecimiento. Es, en definitiva, un buscador implacable que, paso a paso, comienza a dejar huellas en las que se inscribe su nombre, en un contexto que en otros tiempos hubiera sido impensado, pero que en la actualidad se ha vuelto parte de nuestra nueva normalidad, a la que tampoco escapa pero que, desde su lugar, trata de resignificar, llevando también desde su música una especie de alivio para el encierro colectivo.

Y es desde allí, precisamente, desde su reducto más íntimo y desde la virtualidad, que abre las puertas a 1591 Cultura + Espectáculos para dar espacio a un diálogo que discurrirá por diferentes temas, pero que tendrá siempre a la música como eje central. Es que Martín respira música, desde que se despierta hasta que pone fin a su día, no faltan las melodías propias y ajenas envolviendo lo esencial de su existencia, buscando alumbrar nuevas canciones.

Así lo encontró la cuarentena. Y así lo sigue encontrando. «Ensayando; ensayando canciones para grabar a futuro», tal y como él mismo lo describe con notable simpleza y desdramatizando los efectos de la pandemia que, sin embargo, trastocó alguna de sus costumbres. «Al principio me costó porque soy una persona a la que le gusta trabajar con agenda, marcar proyectos, y llevarlos adelante. Tenía la agenda llena; íbamos a hacer la presentación del disco en La Rioja y en otras provincias, pero con la cuarentena se me revolvió la agenda y ahora estoy tratando de retomarla. Voy haciendo dentro de lo que se puede en casa».  

Claro está, Martín hace referencia a la presentación de su primer trabajo discográfico, Por siempre, que quedó trunca a partir del decreto de aislamiento social, preventivo y obligatorio que, sin embargo, le mostró otras posibilidades a las que rápidamente comenzó a adaptarse, tratando de sacar máximo provecho de las redes sociales, donde se muestra muy activo y suma seguidores a diario. 

«Lo que me beneficio mucho esta situación de cuarentena fue el hecho de darle mucho apunte a las redes, enfocarme mucho más ahí», cuenta el joven cantante riojano, quien detalla además que «el disco está en más de 90 plataformas; se hizo una importante inversión para que se escuche más el disco en plataformas como Spotify, por ejemplo».

A ese espacio virtual, muy especialmente, es al que viene prestando atención, entendiendo que las fronteras y los límites se diluyen. «Veo que me escucha gente y me habla gente de Buenos Aires, de Córdoba, y que todos estos mecanismo me permiten difundir las canciones de mi disco. Suelo ver las estadísticas, las suelo ver casi todos los días y descubro que Por siempre se escucha en países como México, Canadá o España. Personalmente tenía una leve idea de las redes; tenía Instagram pero subía muy de vez en cuando, casi nunca subía nada y ahora todo eso empezó a crecer de a poco. Es así como podés llegar a gente de otras provincias, de otros países y eso, al mismo tiempo, te abre la cabeza».

EN CLAVE DE BALADAS

«Por siempre» es el primer trabajo discográfico de Martín Lazo. Vio la luz recientemente y tuvo una muy buena recepción y críticas a partir de las escuchas que hacen los usuarios de más de 90 plataformas musicales a lo largo y ancho de todo el planeta. Se trata de un trabajo en el que el joven artista riojano interpreta en clave de baladas melódicas canciones que lo movilizaron en diferentes etapas de su vida musical y a las que brinda una interpretación a la que, a su vez, ha entregado gran parte de su trabajo, entendiendo que allí está el alma, la esencia, el todo.  

Al igual que en esa búsqueda constante y en el hacer, que le permitió encontrarse con la concreción de un sueño vigente, pero inesperado. «Por siempre es mi primer disco; lo empezamos a grabar el año pasado, a mitad de año, y siempre digo que fue muy sorprendente la manera en que se dio. Fuimos al estudio con la intención de grabar un solo tema, Guanuqueando y salimos con un disco; nos metimos en el tren y le dimos para adelante, y así surgió», cuenta entre risas. No obstante, aclara: «soñaba con el disco, pero no me lo había planteado. Se dio de esa manera, aunque me asustaba la idea de hacer un disco. Habremos tardado unos tres o cuatro meses; sinceramente debo decir que los músicos que me acompañan son muy profesionales. Pero la verdad es que lo soñaba pero no me lo esperaba. Hacer un disco, más hoy, resulta bastante complejo, más si se tiene en cuenta que no se vende mucho, y que masivamente se escucha por las plataformas, pero el hecho de tenerlo suma a la carrera artística».

Por siempre incluye diez temas que fueron cuidadosamente seleccionados por Martín: Fuerte no soy; Guanuqueando; Nadie sabe; Fábulas de amor; Te hubieras ido antes; Nada; Una historia; Hasta que me olvides; Libertango y Tal vez. Cada uno de ellos, tiene algo que ver con el intérprete, desde un lugar en el que se siente identificado plenamente con sus inquietudes musicales, más allá de los géneros en particular. 

«Si bien trato de no me encasillarme y me gustaría a la hora de grabar un disco meter un poco de todo, aprendí y comprendo que un disco tiene que tener una línea. Sin embargo, en este disco hay algo de folklore, algo de tango. Fábula de amor, por ejemplo, es una canción que me encanta y que además es muy conocida, pero la grabamos con un tinte melódico. También grabamos un tango, Nada, pero para no perder la línea, también lo hicimos melódicamente. El disco tiene diez canciones y una de ellas es completamente instrumental, porque todo el tiempo me estaba proyectando sobre la presentación. Imaginaba que cuando empiece el show se luzca la banda; o hacer el show y a la mitad poder descansar mientras los músicos hacen Libertango», cuenta. 

«Los arreglos musicales son de Luis Chazarreta y los vocales son míos, y quien lo escuche se va a encontrar tanto con un clásico como Hasta que me olvides, que es muy conocido por la interpretación de Luis Miguel, como con algún tema que proviene del cuarteto; soy fanático del cuarteto, no canto pero me gusta escucharlo. Así es como resolví bucear entre canciones del año 2000 y llevarlas hacia lo melódico; canciones de bandas como Tru-La-La, que no fueron muy famosas. De allí surgió Nadie sabe, por ejemplo; la escuché y me decidí a rescatarla». 

Cada uno de los elementos que componen Por siempre tienen que ver con la historia de Martín en su derrotero con la música. Así como lo fue desde un principio, cuando se despertó esa vocación que lo acompaña hasta el día de hoy y que lo moviliza en su quehacer diario, a medida que va descubriendo nuevos espacios en los que poder desarrollarse. Con sus 22 años vividos en la plenitud de poder hacer lo que le gusta, lo que le apasiona, Martín recuerda que todo «empezó cuando yo tenía 9 0 10 años. Un día veo que en la tele aparece un cantante que me encantó; era David Bisbal. Lo escuche y me encantó y en ese mismo momento le dije a mi mamá que quería hacer canto. Ella es profe de danza y me apoyó; me mandó a clases de canto, en Umbral. Luego a clases de guitarra. Fue entonces que me empezaron a enseñar mucho folklore, mucha samba, comencé a cantar en peñas, en pequeños festivales, en chayas. Sigo haciendo folklore, pero ahora me metí en otro mundo, el de las baladas, baladas melódicas, melódicos pop», repasa.

Pero volviendo a su primera producción discográfica y a los efectos inesperados de la cuarentena, se lamenta por lo que, por el momento, no pudo ser. «La idea era presentar el disco primero en La Rioja. En patio de Peñas, teníamos previstas dos presentaciones y otras dos en el Paseo Cultural. Pero también teníamos en mente presentarlo afuera, no solo quedarnos acá. Ya teníamos programados algunos lugares, aunque no fechas, en Frías, en Santiago del Estero, en Córdoba y en Buenos Aires. Teníamos las puertas abiertas y sé que lo vamos a hacer seguramente, llegado el momento, cuando se pueda viajar. Lo que quería era poder darle trabajo al equipo, a la banda. Hay muchos músicos que viven de esto y actualmente no pueden hacerlo».

MÁS ALLÁ DE LA RIOJA

Martín Lazo ya cruzó algunas fronteras con su música y a partir de las posibilidades que otorgan las plataformas digitales. Esto, en algún punto, es reflejo de lo que lleva en mente desde que se dedica a la música y, muy especialmente, desde que pudo concebir su primer disco. Salir de La Rioja es un objetivo que lo desvela, no porque reniegue de su lugar de origen, de sus raíces, sino porque quiere llevar su talento y producciones hacia otros escenarios, con la mira puesta siempre en abrir caminos y descubrir nuevos horizontes. No por nada el joven cantante riojano tiene como referentes a nombres de la talla de Sergio Galleguillo, Wally Mercado o la Bruja Salguero. «Se han esforzado, pudieron salir de La Rioja, probaron suerte en otros lugares; admiro mucho que se hayan animado a irse», sostiene, al tiempo que afirma que siempre presta atención a otros artistas. «A David Bisbal tuve la suerte de poder ir a verlo y siento que aprendí mucho solo con ver su show; y eso me sirvió además para poder ver que uno puede trabajar en Buenos Aires también». 

No obstante, en el mientras tanto, Martín va trazando su propio camino desde su lugar en el mundo, donde pudo ponerse en contacto con un músico paraguayo que toca el arpa, y con quien grabó una canción que próximamente dará a conocer. «Es una canción que nació del cuarteto y yo la llevé hacia lo melódico. No es común un artista que toca el arpa y a mí me gusta hacer cosas nuevas. Ahora estoy grabando el videoclip para esa canción», cuenta quien además desarrolla tareas en el Paseo Cultural, desempeñándose como artista junto con músicos como Kike Alamo, bailarines y bailarinas «con los que generamos material para la página de Asuntos Culturales».

«Un sueño pendiente que tengo es ganar la Pre Chaya. También me gustaría ganar el Pre Cosquín, pero le doy mucha más importancia a la Chaya, que es lo nuestro. Quisiera poder cantar en la Chaya, ya se me dio como invitado, pero no como solista. También cantar en Buenos Aires, poder presentar allá el disco, ese es mi objetivo mayor ahora», afirma quien hace del presente una realidad constante en la que se afirma a fuerza de vocación y dedicación. Y es que Martín Lazo sabe, mejor que nadie, que su futuro ya llegó. 

DEFINICIONES

– Hago folklore, tango, melódico. Mi relación con el tango empezó en 2014, en un concurso en la escuela, donde quedé seleccionado para ir a Saldán, en la provincia de Córdoba, donde obtuve el segundo puesto. Califico a Saldán como el precosquín de los jóvenes. A partir de allí se me abrieron muchas puertas con el tango, en eventos, en radios para promocionar mi actividad. Personalmente consideraba que el gancho del disco iba a ser «Fuerte no soy», porque los arreglos fueron tremendos; creo que es la que más me gusta de todas las canciones, pero la que más reproducciones tiene es «Hasta que me olvides». Ahora no me estoy escuchando mucho, pero cuando me escucho busco corregirme todo el tiempo. Por eso dicen que es mejor grabar todo cuanto antes. 

– Actualmente estoy tomando clases con una profe lírica. A lo que más esmero le pongo es a la interpretación, en meterme en la historia de la canción. Personalmente me siento orgulloso con eso, porque siento que le di mucha importancia a la interpretación; no obstante, sigo ensayando las canciones. 

– Tengo temas propios, pero no en el disco. Son todos melódicos, baladas con tinte de pop y rock algunas, un poco. Me gusta meterme más por ahí que es otro tipo de público, un público más joven. 

– Me encanta ser fresco, esforzarme, hacerlo bien. Saludar al público, conectarme, que el público cante, ponerle chispa. Me encanta estar en un escenario y sentir esa adrenalina. En febrero canté en una chaya en la Vieja Estación y salió genial. En el Festival de la Chaya estuve con Kike (Alamo), fue mucha adrenalina también. Es otro sueño cantar en la Chaya, de donde uno es.

– Me gusta proyectar. Ahora estoy escribiendo canciones para el próximo disco, quiero que sean canciones propias. Estoy trabajando en eso, más allá que las grabe el próximo año. Confío en que pronto esto de la pandemia va a pasar. Sigo estudiando canto con una cantante lírica. Me da canciones en italiano, en francés en inglés para cantar con esa técnica. Sigo con lo mío, eso me sirve para trabajar el oído y nuevas técnicas. Todos los días le dedico tiempo a la música: relajación, respiración, vocalización. Trato de estar constante, firme y con todo trabajado. 

– Me gusta mucho emprender, los negocios. Trato de aplicar eso a la música. Empezar un negocio, una marca, por ahí iba el disco. Pienso en hacer un libro, me gusta proyectar, pero siempre dentro del arte y en lo posible dentro de la música. 

(La presente entrevista fue publicada en el suplemento 1591 Cultura + Espectáculos de diario NUEVA RIOJA)

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